El diputado nacional José Luis Espert, referente de La Libertad Avanza y en carrera para renovar su banca, quedó en el centro de la polémica tras una denuncia judicial impulsada por el dirigente social Juan Grabois. En la acusación, Grabois vincula a Espert con el empresario «Fred» Machado, actualmente bajo prisión domiciliaria en Viedma y señalado por la justicia de Estados Unidos por supuesta relación con el narcotráfico. El eje de la controversia es la presunta transferencia de 200.000 dólares desde Machado hacia Espert, una versión que el legislador eludió confirmar o desmentir en una entrevista televisiva, aunque aseguró poder justificar «todo» su patrimonio.

Durante su aparición en A24, Espert fue consultado en reiteradas ocasiones por el periodista Pablo Rossi acerca de si efectivamente recibió el dinero del empresario. Sin dar una respuesta directa, el economista desestimó la denuncia, señalando que se basa en «una supuesta contabilidad paralela» y en documentación de una investigación en Estados Unidos. «No le voy a dar el gusto a Grabois de que esto sea el único tema de campaña», enfatizó, afirmando que lo resolverá en el ámbito judicial y que no permitirá que la discusión pública se reduzca a esta cuestión.

El diputado también se refirió a la posibilidad de abandonar su candidatura tras el escándalo, descartando esa opción tajantemente. «De ninguna manera, estoy más fuerte que nunca», declaró. Sobre el origen de su patrimonio, Espert destacó su extensa trayectoria profesional, recordando que lleva cuatro décadas en la actividad privada y solo en los últimos años sumó su labor como funcionario público.

La denuncia de Grabois tomó estado público a partir de un artículo publicado en ElDiarioAr, que retomó el contenido de la presentación judicial. Entre otros puntos, el texto señala la existencia de presuntos vínculos entre Espert y Machado, empresario que enfrenta cargos en Estados Unidos y cuya situación procesal lo mantiene bajo arresto domiciliario en la ciudad de Viedma.

En una declaración con fuertes críticas, Espert apuntó contra Grabois, acusándolo de «vivir de sacarle dinero a los pobres» y diferenciando su propia fuente de ingresos, que aseguró proviene de su trabajo como empresario agropecuario, autor y docente universitario.

La controversia también tuvo eco en el Congreso, donde legisladores le reclamaron explicaciones al diputado sobre su relación con Machado. Además, Espert aclaró el alcance de sus vínculos con el empresario, relatando que lo conoció en 2019 durante la presentación de su libro «La sociedad cómplice», cuando un abogado le presentó a Machado como un empresario interesado en las ideas de la libertad. Según Espert, Machado lo trasladó en su avión privado hasta Viedma como gesto de cortesía, pero negó que existiera una relación posterior o de mayor profundidad. «En ese momento no estaba en campaña», aclaró, argumentando que su postulación presidencial se oficializó meses después.

Sobre el uso de vehículos y aviones de Machado durante la campaña presidencial de 2019, Espert responsabilizó a los partidos políticos que le dieron la estructura electoral en ese momento, Unir y Unite, encabezados por Alberto Asseff y José Bonacci respectivamente. Según su versión, los candidatos utilizan la logística que proveen los sellos partidarios y no tienen control directo de los recursos usados durante la campaña.

José Bonacci, uno de los dirigentes mencionados, intervino en el debate para negar todo vínculo con Machado y aclarar que la logística provista -como traslados en avión y vehículos- fue para Espert personalmente y no para el partido. Bonacci aseguró que nunca tuvo contacto con el empresario investigado y remarcó que la contabilidad partidaria fue llevada en regla, sin registro de aportes privados del calibre mencionado en la denuncia. Sin embargo, en una declaración que generó nuevas incógnitas, Bonacci acusó a Espert de mentir respecto a la procedencia de los medios de transporte utilizados en la campaña, asegurando que no fue el partido sino Espert quien recibió tales servicios.

En paralelo, Espert también comentó el cambio de postura de Patricia Bullrich, quien primero exigió explicaciones públicas al diputado y luego relativizó el tono de su reclamo, atribuyéndolo a una «desafortunada declaración» y a una mala interpretación de sus palabras.

El episodio, que agita el escenario político a pocos meses de las elecciones, sigue su curso en la Justicia y mantiene a Espert bajo la lupa de sus adversarios y de la opinión pública, mientras el diputado insiste en que podrá demostrar la legalidad de su patrimonio y rechaza cualquier vínculo ilícito con Fred Machado.