En vísperas del inicio de la nueva temporada de la Premier League, el entrenador del Manchester City, Pep Guardiola, ha abordado las crecientes especulaciones sobre el futuro de dos de sus jugadores brasileños: Savinho y Ederson. Durante una conferencia de prensa, Guardiola dejó claro que cualquier jugador que desee abandonar el club simplemente debe solicitarlo directamente.
El delantero Savinho, de 21 años, llegó al City el pasado verano con una transferencia de 45 millones de dólares. A pesar de tener un contrato de cinco años, su futuro en el club parece incierto. En la última temporada, a Savinho le costó destacar, anotando solo tres goles en 48 partidos. Recientemente, el Tottenham ha mostrado interés en el brasileño, especialmente después de la salida de Son Heung-min y la lesión de James Maddison.
En declaraciones al respecto, Guardiola expresó su deseo de que Savinho permanezca en el equipo. «Solo me preocupa ahora mismo que Savinho esté con nosotros por muchos años porque a sus 21 años tiene un gran potencial», afirmó el técnico español. Sin embargo, Savinho no participará en el partido inaugural de la temporada debido a una lesión sufrida durante un amistoso en Sicilia.
En cuanto al arquero Ederson, de 31 años, su situación también ha generado rumores. Desde su llegada desde Benfica en 2017, Ederson se ha consolidado como una pieza clave en el equipo, contribuyendo a seis títulos de liga. No obstante, informes recientes indican que el Galatasaray de Turquía podría estar interesado en sus servicios. Guardiola, aunque consciente de los rumores, mencionó que Ederson no le ha expresado ningún deseo de abandonar el club.
Guardiola reafirmó su postura de que el deseo de los jugadores es primordial, pero también dejó entrever que el City ya está considerando alternativas. Se ha mencionado la posibilidad de contactar al PSG para negociar por el arquero Gianluigi Donnarumma si Ederson decide partir.
Con el inicio de la temporada a la vuelta de la esquina, Guardiola enfrenta la tarea de mantener la cohesión del equipo mientras navega por la incertidumbre del mercado de transferencias. El técnico se mantiene firme en su enfoque, insistiendo en que cualquier decisión final recaerá en los jugadores y sus deseos personales.