En medio de un clima financiero marcado por la inestabilidad del dólar y tasas de interés elevadas, el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, salió a respaldar el plan económico impulsado por el presidente Javier Milei. Quirno aseguró que el gobierno mantiene un «norte muy claro» y, con tono firme, descartó de plano cualquier posibilidad de que la administración retroceda o sea derrocada.
Durante una entrevista con el periodista Antonio Laje, el funcionario fue consultado sobre la viabilidad del modelo económico en curso. «Va a funcionar, no hay ninguna duda porque tenemos el convencimiento de un norte muy claro en función de lo que hemos creado y generado con el Presidente Javier Milei», expresó Quirno, subrayando la confianza interna respecto a los lineamientos económicos del Ejecutivo.
Al profundizar sobre el escenario político, Quirno se mostró categórico al afirmar que «no hay forma que nos volteen porque estamos preparados para dar la batalla y defender a los argentinos». Además, marcó distancia con gestiones anteriores al afirmar: «Kirchnerismo Nunca Más», frase que refuerza la apuesta oficial por consolidar el modelo actual y evitar cualquier retorno a políticas previas.
El secretario de Finanzas también hizo referencia a la persistente volatilidad cambiaria, anticipando que se mantendrá al menos hasta las elecciones legislativas del 26 de octubre. Quirno atribuyó parte de los sobresaltos en el mercado de divisas a maniobras de la oposición, que, según su visión, busca complicar la hoja de ruta oficial mediante iniciativas parlamentarias y la derogación de vetos presidenciales.
En el marco de la 46ª Convención Anual del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas, realizada en Bariloche, Quirno dialogó con empresarios e inversores sobre las dificultades del contexto actual. Allí remarcó el compromiso del gobierno con el «orden fiscal y equilibrio fiscal», considerándolo un principio irrenunciable para el equipo económico. «El orden macroeconómico es fundamental para reducir el impuesto inflacionario, el más perverso y que más afecta a los sectores vulnerables», argumentó, defendiendo el programa encabezado por Milei.
Según el secretario, la etapa preelectoral ha generado una «psicosis bastante particular» en el país, producto de la ansiedad e incertidumbre que rodean los comicios legislativos. A esto se suma, sostuvo, la presión ejercida por la oposición en el Congreso, que busca poner a prueba la solidez política y económica del oficialismo.
Por su parte, el ministro de Economía Luis Caputo reforzó esta postura desde sus redes sociales, donde ratificó la decisión de profundizar el rumbo económico. «Solo vamos a acelerar, como quiere la gente. Avanzaremos con las reformas tributaria y laboral para seguir cambiando el país», publicó Caputo, acompañando el mensaje con un video en el que remarca que la demanda popular es avanzar con las transformaciones y no dar marcha atrás.
La intervención de Caputo llega en un momento clave, donde la presión política y la incertidumbre electoral se reflejan en la dinámica de los mercados. El funcionario buscó así despejar dudas y recalcar que, pese a las dificultades coyunturales, las reformas estructurales continúan siendo una prioridad en la agenda del gobierno.
En síntesis, tanto Quirno como Caputo se muestran confiados en la dirección económica adoptada, asegurando que el Ejecutivo está preparado para enfrentar la volatilidad y las presiones políticas de cara a las próximas elecciones. El mensaje oficial es claro: el compromiso con el equilibrio fiscal y las reformas no se detendrá, y la apuesta es sostener el rumbo pese a las turbulencias.