En una señal clara de reconfiguración política, seis gobernadores que forman Provincias Unidas se reunieron este martes en Puerto Madryn con el propósito de posicionarse como una nueva alternativa nacional de cara a 2027. La presencia de los mandatarios provinciales, junto al empresario Javier Madanes Quintanilla —presidente de Aluar—, reforzó el mensaje de unidad y ofreció duras críticas al gobierno de Javier Milei y a la histórica polarización política argentina.
El acto, realizado en la planta de Aluar, contó con la participación de Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Ignacio Torres (Chubut), Carlos Sadir (Jujuy), Gustavo Valdés (Corrientes), Martín Llaryora (Córdoba) y Claudio Vidal (Santa Cruz), además del ex gobernador cordobés Juan Schiaretti. Esta foto conjunta fue interpretada como el primer paso visible para construir una opción superadora al actual oficialismo y a la oposición tradicional.
Fuertes críticas al gobierno nacional y al viejo esquema político
El gobernador santafesino Maximiliano Pullaro fue especialmente contundente al cuestionar la gestión del presidente Milei: «Para que no vuelva más el kirchnerismo, no alcanza con hacerse el loquito gritando y peleando con todo el mundo», sentenció. De este modo, marcó distancia tanto del actual oficialismo como de la oposición liderada por el kirchnerismo, buscando instalar la idea de que es necesaria una alternativa que supere la lógica de confrontación permanente.
Por su parte, Ignacio Torres, anfitrión del encuentro, señaló que «el desafío en estas elecciones es romper con la polarización». «Estamos cansados de tener que elegir siempre entre Cristina y Milei», agregó, planteando la necesidad de una renovación en la oferta política.
Juan Schiaretti, con un perfil crítico, pidió enviar «un mensaje al Gobierno nacional para que cambie el rumbo», mientras que Claudio Vidal alertó sobre el impacto de la «falta de diálogo, soberbia y desconocimiento del interior nacional productivo» del actual gobierno. Según Vidal, «el ajuste no es la receta para salir adelante sino que genera más pobreza».
Reclamo federal y defensa de la producción
La visita a Aluar, la mayor fábrica de aluminio de Argentina y una de las más importantes de Latinoamérica, sirvió de escenario para plantear un reclamo concreto: la eliminación del sobre-arancel impuesto por Estados Unidos a las exportaciones de aluminio argentino. Schiaretti definió la planta como «un patrimonio de la Argentina» y subrayó que la medida estadounidense afecta directamente al desarrollo del interior productivo.
En sintonía, Martín Llaryora caracterizó a Provincias Unidas como «una coalición distinta a las conocidas, una coalición del sentido común y profundamente federal». Remarcó que la agrupación surge «del interior profundo del país» para defender «el valor de la producción y el trabajo por sobre el modelo actual de especulación financiera». Llaryora insistió en que «hay dos modelos que ya fracasaron y nosotros queremos que al país le vaya bien».
Apuestas por la educación y la salud pública
El correntino Gustavo Valdés, a su turno, denunció que «cuando vamos a Buenos Aires nos ningunean, nos destratan» y pidió poner fin a esa situación. Además, defendió la educación pública y gratuita como «esencial» para un país viable, y ratificó el compromiso del espacio con la construcción de un sistema de salud pública accesible para todos los argentinos.
Carlos Sadir, gobernador de Jujuy, subrayó que Provincias Unidas es «sinónimo de desarrollo y diálogo» y aspiró a «conformar una mayoría importante que nos permita competir» en próximas elecciones. Sadir también aludió a la delicada situación en la que algunos mandatarios recibieron sus provincias, con serios problemas económicos y sociales.
Una alternativa en construcción
Voceros cercanos a los gobernadores destacaron que el encuentro es parte de una estrategia progresiva para «romper la polarización». «Tenemos que mostrar a las provincias que existe una alternativa diferente al mileísmo y al kirchnerismo. Si canalizamos el voto positivo, podemos competir con fuerza en cada distrito», explicaron.
El lanzamiento de Provincias Unidas marca así el inicio de una nueva etapa política, en la que el federalismo, el desarrollo industrial, la educación y la salud pública se ubican en el centro del debate, con el objetivo declarado de dejar atrás la división entre los dos polos tradicionales de la política nacional.