El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, salió públicamente este miércoles para confirmar la continuidad de las bandas cambiarias implementadas meses atrás como parte del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Durante una entrevista televisiva, el funcionario puso énfasis en que la política cambiaria del gobierno se mantiene sin alteraciones y que el Tesoro solo intervendrá en situaciones excepcionales relacionadas con la liquidez del mercado.
Quirno explicó que la administración económica sigue el programa consensuado con el FMI, que incluye la recapitalización del Banco Central y la utilización de un sistema de bandas para el dólar: “Compramos dólares cuando la cotización llega al piso de la banda y vendemos cuando se acerca al techo”, puntualizó. De esta manera, el gobierno busca mantener la estabilidad del tipo de cambio sin establecer un valor fijo para la moneda estadounidense.
El secretario de Finanzas aclaró que las recientes intervenciones del Tesoro en el mercado cambiario no implican una modificación de las reservas ni del acuerdo firmado con el organismo internacional. “Administramos situaciones puntuales de liquidez con recursos propios surgidos del superávit fiscal”, sostuvo. Además, Quirno remarcó que la gestión no tiene un objetivo de perseguir un determinado valor para el dólar, sino que su acción está orientada a evitar movimientos abruptos e injustificados en la cotización.
En este sentido, el funcionario lanzó una fuerte acusación contra una entidad bancaria de origen chino, señalando que habría intentado influir sobre la cotización del dólar con maniobras especulativas. Según Quirno, el objetivo de estas acciones sería provocar una suba artificial del valor de la divisa mediante operaciones de gran volumen que distorsionan el mercado.
Quirno también reveló que antes de poner en marcha la nueva modalidad de intervención, el gobierno consultó y obtuvo el visto bueno de las autoridades del FMI, quienes avalaron la operatoria.
Respecto al actual clima de incertidumbre económica y política, el secretario de Finanzas consideró que se trata de una situación pasajera. “Es evidente que los periodos de inestabilidad llevan a que tanto consumidores como inversores se vuelvan más cautelosos y retraigan sus decisiones, pero creemos que esto será acotado en el tiempo”, afirmó. Asimismo, negó que exista riesgo de una devaluación futura, desestimando las especulaciones sobre el comportamiento del dólar en los contratos de futuros.
Durante la entrevista, Quirno también aludió a la compleja coyuntura política que atraviesa el país. Sostuvo que sectores opositores han impulsado acciones para obstaculizar el equilibrio fiscal, como el rechazo de una docena de leyes clave en el Congreso. Además, denunció la existencia de operaciones de espionaje ilegal y la utilización de grabaciones antiguas para dañar al gobierno. En este contexto, recordó que el presidente fue víctima de un atentado reciente, subrayando la gravedad del panorama institucional.
Por último, el funcionario se refirió al aumento de las tasas de interés, que en el caso de las LECAPS de menor plazo alcanzaron el 75% en la última licitación. Según Quirno, este fenómeno es consecuencia directa de la confrontación política. “El país debe prepararse para que la incertidumbre continúe hasta finales de octubre”, advirtió, sugiriendo que el escenario podría mantenerse volátil hasta después de las elecciones.