En medio de una de las semanas más delicadas para su gobierno, el presidente Javier Milei mantuvo inalterable su agenda y convocó a los principales candidatos a diputados y senadores de La Libertad Avanza (LLA) en la residencia de Olivos. A pesar del reciente golpe electoral sufrido en la Provincia de Buenos Aires, Milei buscó transmitir optimismo y encarar la campaña con renovado impulso.
El encuentro sucedió en un contexto económico desafiante, con el dólar en su máximo permitido y el riesgo país superando los 1400 puntos. Aun así, la estrategia oficial se sostiene en la premisa de que un buen desempeño en las elecciones de octubre podría ser clave para estabilizar los mercados. Restan aún treinta ruedas cambiarias antes de los comicios, un lapso que desde el Ejecutivo consideran una verdadera prueba de resistencia.
Junto a Milei estuvieron su hermana y secretaria general, Karina Milei, y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. La reunión se realizó apenas un día después de la dura derrota sufrida por el oficialismo en la legislatura bonaerense, donde seis de las ocho secciones electorales fueron adversas. El presidente instó a los presentes a evitar lecturas catastróficas y a valorar el crecimiento de LLA en los últimos dos años.
Entre los asistentes se destacaron figuras sin cargos formales, como el ex gobernador bonaerense Carlos Ruckauf, quien relativizó la derrota frente a la histórica fortaleza del peronismo en el distrito, y el influencer libertario Mariano Pérez, vinculado a la agrupación Fuerzas del Cielo. También se sumó Fernando de Andreis, mano derecha de Mauricio Macri y candidato a diputado por la Ciudad, reflejando la creciente confluencia entre sectores del PRO y el oficialismo libertario.
En la reunión, Santiago Caputo, uno de los principales asesores del presidente, recomendó a los candidatos evitar la confrontación con los gobernadores bien valorados en sus provincias, ya que la mayoría mantiene altos niveles de aceptación entre sus electores. El consultor también tuvo que compartir mesa con Sebastián Pareja, señalado internamente como uno de los responsables del reciente traspié electoral en la provincia.
El clima del encuentro fue de franca autocrítica pero con miras a fortalecer la campaña. Diego Valenzuela, intendente de Tres de Febrero y ahora senador bonaerense electo, destacó en redes sociales la importancia de no ceder ante la adversidad y valoró los avances logrados desde la llegada de LLA al escenario nacional.
Con la campaña en el centro de la escena, Milei planea recorrer distritos clave donde su figura tracciona más votos que los propios candidatos, muchos de ellos poco conocidos fuera de sus regiones. Este viernes, el mandatario viajará a Córdoba, bastión donde alcanzó el 74% de los votos en el balotaje. También tiene previstas visitas a Santa Fe, Entre Ríos y Mendoza, mientras que Karina Milei y su equipo cubrirán los territorios a los que el presidente no pueda llegar.
Durante la jornada, Milei también respondió preguntas de los candidatos. Virginia Gallardo, postulante a diputada por Corrientes, consultó sobre el rumbo económico y el futuro de las jubilaciones y pensiones, a lo que el presidente aseguró estar trabajando en soluciones, aunque sin dar detalles concretos.
Por la tarde, Karina Milei encabezó una segunda reunión, esta vez con los jefes de campaña de los 24 distritos, donde se prometieron recursos y apoyo logístico para intensificar la presencia territorial. La secretaria general instó a los candidatos a no bajar los brazos y salir activamente a la calle, convencida de que el oficialismo puede revertir el escenario.
El armado del oficialismo incluyó también la presencia de ministros como Patricia Bullrich y Luis Petri, el vocero Manuel Adorni y el flamante titular de Interior, Lisandro Catalán. Más temprano, Milei había replicado en redes sociales las declaraciones del ministro de Economía, Luis Caputo, quien denunció intentos de la oposición por desestabilizar al gobierno.
Así, en un clima de desafíos tanto políticos como económicos, Milei apuesta a su liderazgo personal y a una campaña nacional reforzada para recuperar terreno de cara a octubre, confiando en que la movilización y el respaldo a sus candidatos puedan revertir la reciente derrota.