Este jueves, la Corte Suprema de Justicia de Argentina desestimó un recurso presentado por el empresario Carlos Wagner en el marco de la causa conocida como los ‘Cuadernos de las Coimas’. Wagner intentaba que el máximo tribunal reabriera la discusión sobre la asignación inicial del expediente al juez Claudio Bonadio, con el objetivo de retrasar el juicio oral y público programado para el 6 de noviembre, en el que la ex presidenta Cristina Kirchner será una de las principales acusadas.
La decisión de la Corte, firmada por los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, se basó en que el recurso de Wagner no estaba dirigido contra una sentencia definitiva o equiparable. En esta megacausa, que involucra a un centenar de imputados, figuran nombres como el del ex ministro Julio De Vido, Roberto Baratta, y varios empresarios vinculados a la obra pública, incluyendo a Ángelo Calcaterra, primo de Mauricio Macri. Además, se espera la participación de unos 600 testigos.
Wagner, quien fue presidente de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), es uno de los 31 imputados que se acogieron a la figura del arrepentido para reducir su posible condena. Durante la instrucción, a cargo de Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli, Wagner confesó haber pagado sobornos y detalló el funcionamiento del sistema de cartelización de la obra pública durante el kirchnerismo. Explicó que las empresas recibían contratos a cambio de anticipos financieros que el Estado pagaba, y que los sobornos se realizaban devolviendo parte de los pagos recibidos como certificados de obra.
No obstante, con el caso ya elevado a juicio, Wagner solicitó la nulidad de toda la causa alegando que su declaración fue bajo presión y que hubo ‘forum shopping’ al direccionar el caso a favor de Bonadio y Stornelli. Aseguró también que debía declararse inconstitucional la figura de asociación ilícita. Inicialmente, el Tribunal Oral Federal 7 rechazó estos planteos, argumentando que las cuestiones sobre la asignación del caso habían sido resueltas al inicio de la investigación y que Wagner no fue obligado a declarar contra sí mismo.
La Cámara Federal de Casación Penal también desestimó la apelación de Wagner, y ahora la Corte Suprema ha rechazado intervenir, al no tratarse de una sentencia definitiva. En el contexto de esta causa, se destacó el intento del llamado Operativo Puf, donde diputados, abogados y empresarios vinculados al kirchnerismo buscaron destituir a Bonadio y Stornelli, acusándolos falsamente de extorsión.