Guillermo Barros Schelotto ha vuelto a demostrar su habilidad para llevar equipos a las fases finales de la Copa Libertadores de América. Con una larga trayectoria en este torneo, tanto como jugador y ahora como entrenador, el Mellizo ha colocado a Vélez en los cuartos de final, consolidando su reputación como uno de los nombres más destacados del fútbol sudamericano.
Barros Schelotto, originario de Gimnasia La Plata, dejó una marca indeleble en Boca Juniors, donde comenzó su andadura en la Copa Libertadores en el año 2000. Fue parte del equipo campeón de Boca en 2000 y 2001, aunque en su primera participación quedó fuera por lesión en los partidos contra El Nacional de Ecuador. En 2001, tuvo un papel crucial al anotar en la vuelta contra Junior de Barranquilla.
En 2003, bajo la dirección de Carlos Bianchi, Boca ganó su tercera Libertadores con Barros Schelotto anotando tres goles decisivos contra Paysandú de Brasil. En 2004, volvió a ser fundamental para su equipo, revirtiendo el marcador contra Sporting Cristal con dos goles. Aunque su participación en la Libertadores con Boca finalizó en 2007, su legado quedó intacto.
Como entrenador, debutó en la Libertadores con Lanús en 2014. Llevó al equipo a cuartos de final tras eliminar a Santos Laguna de México, aunque luego fueron vencidos por Bolívar. Su regreso a Boca en 2016 lo vio nuevamente en la palestra, llevando a su equipo hasta las semifinales antes de caer ante Independiente del Valle.
En 2018, dirigió a Boca hasta la final, superando a Libertad de Paraguay en octavos. Sin embargo, su ciclo terminó con una derrota ante River en el Santiago Bernabéu, un partido que quedó en la memoria de todos los aficionados al fútbol.
Este año, Barros Schelotto asumió el desafío de dirigir a Vélez en la Copa Libertadores. Con un equipo que ha encontrado su ritmo, consiguió victorias importantes contra Independiente y Fortaleza de Brasil, asegurando así su lugar en los cuartos de final una vez más. La historia de Barros Schelotto en la Libertadores es un testimonio de su capacidad para liderar y triunfar en el escenario más prestigioso del fútbol sudamericano.