El reciente fallo judicial contra Claudio Contardi, quien fue sentenciado a 19 años de prisión por abuso sexual agravado contra su ex esposa, la modelo Julieta Prandi, ha resonado fuertemente en la sociedad argentina. Esta condena, dictada por el Tribunal en lo Criminal N°2, llega tras un proceso judicial que expuso no solo el abuso sufrido por Prandi entre 2015 y 2018, sino también las dificultades que enfrentan las víctimas de violencia de género en el sistema judicial.
Julieta Prandi, visiblemente emocionada, expresó su alivio tras conocer la sentencia: «Hoy empiezo a vivir», manifestando la sensación de haber finalmente encontrado justicia. La modelo y conductora agradeció el apoyo recibido y destacó la importancia de este fallo como un precedente para otras mujeres que enfrentan situaciones similares.
El juicio incluyó testimonios de peritos, psicólogos y familiares que detallaron el deterioro físico y emocional de Prandi durante los años de abuso. Flavia Crupi, su psicóloga, describió cómo Contardi manipuló y aisló a Prandi, buscando vivir de ella y satisfacer sus deseos económicos y sexuales de manera sádica.
El caso también generó una fuerte reacción en las redes sociales y entre personalidades públicas. La diputada Gabriela Estévez criticó la lentitud del sistema judicial, señalando que si a una mujer con visibilidad le llevó cinco años obtener justicia, el proceso es aún más arduo para mujeres anónimas. Alejandra Vigo, senadora, enfatizó que el matrimonio no debería proteger a un agresor, subrayando la importancia de visibilizar el abuso dentro de cualquier relación afectiva.
El fallo ha sido catalogado como histórico, no solo por la severidad de la condena sino también por su potencial para establecer jurisprudencia en casos futuros. La diputada Karina Banfi destacó la relevancia del veredicto como un llamado de atención para las autoridades judiciales, mientras que Victoria Donda lo definió como un «acto de rebeldía y amor», que devuelve algo de la vida robada a Prandi.
Por otro lado, la reacción en el entorno de Contardi ha sido de resistencia. Su nuevo abogado, Fernando Sicilia, planea solicitar su liberación bajo arresto domiciliario, argumentando que la prisión preventiva podría ser revocada.
Este veredicto subraya la necesidad de un sistema judicial más expedito y sensible a las víctimas de violencia de género. La sentencia de 19 años es vista por muchos como un paso hacia adelante en la lucha contra la impunidad en casos de abuso sexual. Julieta Prandi, al recibir el fallo, expresó su deseo de que esto marque «un antes y un después» para todas las víctimas, y que la justicia se convierta en un recurso real y accesible para todas las mujeres.