Carlos Melconian, reconocido economista y presidente del Banco Nación, analizó el reciente anuncio del Tesoro de Estados Unidos que promete un respaldo económico sin precedentes al gobierno de Javier Milei. Según Melconian, el apoyo supera ampliamente cualquier intervención previa del Fondo Monetario Internacional (FMI) y supone un giro radical en la política económica argentina.
El debate se encendió tras el mensaje del secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, quien, a través de las redes sociales, comunicó que la administración republicana está dispuesta a comprar bonos argentinos en dólares y a otorgar un crédito stand-by a través del Fondo de Estabilización Cambiaria. El anuncio se produjo tras una reunión entre Milei y el expresidente Donald Trump en Nueva York, lo que refuerza la dimensión política y estratégica del respaldo.
«Esto es muy fuerte», sostuvo Melconian en diálogo con Radio con Vos, aludiendo al impacto del anuncio y su diferencia con los acuerdos tradicionales del FMI. Para el economista, el auxilio estadounidense representa «un giro de 180 grados» y coloca a la Argentina en una situación inédita, donde «todo lo que uno tenía en mente por hacer se reduce», ya que la magnitud del respaldo cambia las reglas del juego.
El economista remarcó que, a diferencia del FMI, el involucramiento del Tesoro norteamericano es mucho más profundo. «El Fondo y sus acuerdos son un bebé de pecho al lado de esto, pero no por la magnitud del dinero sino por el nivel de implicancia», explicó Melconian. Incluso ironizó que el FMI, ante este movimiento, «está en el cuartito de al lado de Bessent, mirando cómo pasan las cosas».
En el plano operativo, Scott Bessent detalló que el Tesoro norteamericano ya inició conversaciones con las autoridades argentinas para establecer una línea swap de 20.000 millones de dólares con el Banco Central, y que trabajan «en estrecha coordinación» para evitar una volatilidad excesiva en el mercado cambiario. Además, el funcionario adelantó que están dispuestos a comprar deuda argentina tanto en el mercado primario como secundario, y que se está discutiendo la eliminación de exenciones fiscales a exportadores que liquidan divisas.
Melconian recordó un antecedente de este tipo de auxilio en México durante 1994 y advirtió que siempre existen contrapartidas exigidas por el país que otorga el respaldo. «México puso las garantías petroleras de Pemex sobre la mesa. Siempre hay garantías», señaló, sugiriendo que habrá que analizar en detalle los términos del acuerdo con Estados Unidos.
Sobre el futuro, Melconian subrayó que el éxito de este tipo de programas se mide por la confianza: «Lo ideal sería no tener que usar lo que te ofrecen, porque eso implica que se recuperó la confianza y no se necesita el auxilio». Para el economista, el desafío central de Milei será lograr que los mercados y la sociedad crean en la estabilidad del peso argentino, en vez de profundizar la dolarización.
Finalmente, Melconian insistió en que las expectativas están puestas en la actitud que adopte el presidente Milei al regresar al país y en cómo se implementarán los detalles del apoyo estadounidense. «El proceso de confianza que viene por delante es muy importante», concluyó, dejando abierta la incógnita sobre los próximos pasos del gobierno y el impacto real de este decisivo respaldo internacional.