La Catedral del rugby porteño, el estadio del Club Atlético San Isidro (CASI), será el escenario de una final inédita en la historia reciente del Top 12 de la URBA. En un duelo cargado de expectativas, el San Isidro Club (SIC) y Newman se enfrentarán este sábado a las 17.10, en busca de la gloria máxima del rugby bonaerense. La venta total de entradas anticipa una jornada repleta de emoción y pasión en las tribunas, que estarán divididas entre la esperanza del Cardenal y la confianza del Zanjero.
El encuentro, dirigido por Tomás Bertazza —el mismo árbitro que impartió justicia en la definición del año pasado—, será transmitido en directo por ESPN 2 y Disney+ desde las 16.40. Aunque el anfitrión tradicional no participará, la mística de La Catedral promete un marco inigualable para la definición del torneo.
Newman: a la caza de su primer título
Newman llega a esta instancia por segunda vez en su historia, luego de haber perdido la final de 2008 ante Hindú. El presente, sin embargo, lo encuentra en un momento de madurez colectiva y con la sensación de tener una oportunidad irrepetible. Durante la fase regular, el equipo dirigido por Santiago Piccaluga y Marcos Ayerza finalizó en el tercer puesto, con un saldo de 16 victorias y 6 derrotas. Su rugby se destacó por la precisión y el dinamismo, apoyado en un pack sólido y tres cuartos incisivos.
En semifinales, Newman dejó en el camino a Belgrano con un contundente 41-24, confirmando su potencial ofensivo. Acumuló 624 puntos en el torneo, con 79 tries, y cuenta con el liderazgo de Gonzalo Gutiérrez Taboada, máximo goleador con 227 puntos. Marcelo Brandi y Santiago Marolda, ambos con nueve tries, refuerzan una identidad de ataque ordenada y cerebral.
El desafío es mayúsculo: desde 1998, cuando se implementó el formato de playoffs, ningún club sin títulos ha logrado consagrarse campeón. La última vez que un equipo se estrenó en lo más alto fue Hindú, hace casi treinta años. Si el Bordó logra romper la tendencia, será la culminación de un proceso sostenido y no una mera sorpresa.
SIC: experiencia y linaje de campeón
En la vereda opuesta, el SIC se presenta como un habitué de las grandes definiciones. Esta será su vigesimotercera final, con un palmarés que incluye ocho títulos en las últimas doce y un total de 27 consagraciones a lo largo de su rica historia. Bajo la conducción de Eduardo Victorica y Gonzalo Longo, el equipo terminó cuarto en la fase regular (15 triunfos y 7 derrotas) y avanzó a la final tras superar al CASI por 13-9 en una semifinal de mucha fricción y carácter.
El Zanjero sumó 671 puntos y 83 tries, con un ataque que ofrece variedad y contundencia. Su apertura, Santiago Pavlovsky, es el máximo anotador con 169 puntos y representa la precisión táctica del equipo. Jacinto Campbell y Andrea Panzarini, ambos con nueve tries, son amenazas constantes en las puntas.
La única modificación respecto a la semifinal es el ingreso de Manuel Curuchaga por Bautista Viero, quien sufrió una grave lesión cervical en el clásico y fue intervenido quirúrgicamente, con una evolución favorable.
Un historial cargado y una final que promete
El antecedente inmediato registra un triunfo para cada uno en la temporada pasada: SIC se impuso 34-24 en Boulogne, mientras que Newman ganó 45-21 en Benavídez. Desde 1981, el balance general favorece al SIC por 41 victorias a 19, con dos empates, aunque en las finales la historia suele escribirse con tinta nueva.
Por un lado, Newman llega con la energía de quien busca su primera consagración; por el otro, el SIC apelará a la jerarquía y la experiencia que lo convirtieron en referente del rugby metropolitano. En La Catedral, ambos buscarán escribir un nuevo capítulo para el deporte de la ovalada.


