El reciente enfrentamiento entre Barracas Central y Boca Juniors por el Torneo Clausura 2025 dejó mucho más que un resultado deportivo. El partido, jugado en la cancha del ‘Guapo’, estuvo marcado por un arranque intenso y una jugada clave que derivó en la expulsión temprana de Iván Tapia, capitán y figura del conjunto local, además de ser hijo del presidente de la AFA, Claudio ‘Chiqui’ Tapia.
Todo comenzó a los seis minutos de juego, cuando un cruce entre Leandro Paredes, capitán de Boca, e Iván Tapia encendió la mecha. Ambos futbolistas recibieron tarjeta amarilla tras una discusión que incluyó palabras al oído y un empujón del campeón del mundo. Esta amonestación tuvo una doble lectura: para Paredes representó la quinta amarilla acumulada, lo que le permite ‘limpiarse’ y llegar habilitado al próximo Superclásico, uno de los partidos más esperados del fútbol argentino.
La tensión en el terreno de juego siguió creciendo. Minutos después del primer altercado, Tapia y Paredes volvieron a encontrarse en otra jugada disputada. Esta vez, el mediocampista de Barracas realizó una fuerte entrada a la altura de la canillera, aunque sin llegar a golpear efectivamente a su rival. El árbitro Nicolás Lamolina no dudó y le mostró la segunda amarilla a Tapia, lo que significó su expulsión y dejó a Barracas Central con un jugador menos en el arranque mismo del partido. El VAR, comandado en esta ocasión por Silvio Trucco, no pudo intervenir, ya que el protocolo impide su actuación en jugadas sancionadas por doble amonestación.
La decisión arbitral fue cuestionada por algunos sectores y sumó presión sobre Nicolás Lamolina, quien estuvo a cargo de impartir justicia en un encuentro con alto voltaje emocional y con el trasfondo del parentesco de Tapia con el máximo dirigente del fútbol argentino. Producto de la polémica y de otros errores señalados en su conducción del partido, el director nacional de Arbitraje, Federico Beligoy, tomó una resolución contundente: Lamolina no fue designado para dirigir en la próxima fecha del torneo, que se disputará el fin de semana siguiente.
La sanción indirecta al juez se reflejó en la nómina de árbitros publicada para la fecha 14 del Torneo Clausura. Allí aparecen los nombres de Pablo Echavarría, Fernando Espinoza, Nicolás Ramirez, Jorge Baliño, Andrés Merlos, Sebastián Zunino, Sebastián Martínez, Leandro Rey Hilfer, Andrés Gariano, Nazareno Arasa, Juan Pafundi, Yael Falcón Pérez, Luis Lobo Medina, Fernando Echenique y Facundo Tello, entre otros. Lamolina, en cambio, fue apartado de la lista, en una señal clara de que las autoridades buscan bajar el perfil del conflicto y evitar mayores repercusiones.
Por su parte, la expulsión de Tapia dejó a Barracas Central en desventaja numérica durante la mayor parte del partido, condicionando el desarrollo del juego y reavivando el debate sobre la influencia de las decisiones arbitrales en el fútbol argentino. La situación también volvió a poner en el centro de la escena a los protagonistas: Paredes, que con su quinta amarilla cumplió un objetivo estratégico pensando en el futuro Superclásico; y Tapia, quien, por su doble condición de capitán y de hijo del presidente de la AFA, quedó bajo la lupa de la opinión pública.
De esta manera, el duelo entre Barracas Central y Boca no solo dejó secuelas en la tabla de posiciones, sino que también agitó las aguas en el arbitraje nacional, generando cambios inmediatos en las designaciones y sumando un nuevo capítulo a las siempre apasionadas discusiones alrededor del fútbol argentino.
