La Roma logró una valiosa victoria como visitante frente al Sassuolo por 1-0, en un encuentro correspondiente a la octava fecha de la Serie A italiana. El único tanto del partido lo marcó el argentino Paulo Dybala, quien fue determinante para que el equipo dirigido por Gian Piero Gasperini alcanzara la cima del campeonato, igualando en puntos al Napoli.

El conjunto romano venía de atravesar una semana difícil, ya que había sufrido dos derrotas consecutivas: la primera ante el Inter de Milán en el estadio Olímpico y la segunda en la Europa League frente al Viktoria Pilsen. Sin embargo, los dirigidos por Gasperini supieron reponerse y se llevaron tres puntos fundamentales fuera de casa.

El gol de la victoria llegó promediando el segundo tiempo. Tras un remate de Bryan Cristante, el arquero del Sassuolo logró rechazar el balón, pero la pelota quedó en los pies de Dybala, quien no dudó y definió de derecha para marcar su segundo tanto en la temporada. El argentino, que arrastra una temporada marcada por las lesiones, ya había convertido de penal en el reciente encuentro ante el Viktoria Pilsen, aunque en ese caso su gol no alcanzó para evitar la derrota.

Con este triunfo, la Roma suma 18 puntos, los mismos que el Napoli, que el sábado había vencido al Inter de Lautaro Martínez por 3-1. La tabla está al rojo vivo: el Milan, que igualó 2-2 ante el Pisa en San Siro, quedó apenas un punto por detrás, mientras que el Inter bajó al cuarto puesto con 15 unidades. Desde la temporada pasada, si dos equipos terminan igualados en puntos al finalizar el campeonato, el campeón se define en un partido desempate en cancha neutral, lo que suma dramatismo a cada fecha.

La Roma se destaca este año por su solidez defensiva, siendo el equipo menos goleado hasta el momento con apenas tres tantos en contra. Sin embargo, en ataque no ha tenido un rendimiento sobresaliente, ya que solo ha convertido ocho goles a lo largo de estas ocho jornadas. Esta solidez atrás ha sido clave para mantenerse en la pelea por el título.

Un dato curioso es que los mejores resultados de la Roma se han dado fuera de casa. De hecho, las cuatro derrotas que acumula en la temporada (dos en Serie A y dos en Europa League) se produjeron en su propio estadio, el Olímpico. Esta tendencia preocupa a Gasperini, quien manifestó tras la victoria: “Estoy muy satisfecho por la reacción del equipo después de dos caídas seguidas. Ahora la prioridad es volver a ganar en nuestra cancha y recompensar a nuestros hinchas. Debemos ser más eficaces en casa”.

Paulo Dybala, protagonista de la jornada, valoró la importancia del triunfo pero pidió mesura: “Sabíamos que podíamos ponernos líderes antes de este partido, pero no nos aceleramos. El campeonato todavía es muy largo”. El delantero, campeón del mundo con Argentina, busca dejar atrás los problemas físicos y convertirse en la figura que la Roma necesita para pelear por el Scudetto.

Con la Serie A más pareja que nunca, la lucha por el título promete ser apasionante. Napoli, Roma y Milan están separados por apenas un punto, mientras que el Inter acecha de cerca. La próxima fecha será clave para definir si la Roma puede romper la racha negativa en el Olímpico y consolidarse como candidato.