El presidente Javier Milei se pronunció con firmeza en respaldo a José Luis Espert, tras las recientes acusaciones de la oposición que vinculan al economista con presunto financiamiento proveniente del narcotráfico. En una entrevista radial, Milei desestimó de plano las denuncias y apuntó directamente contra sectores del kirchnerismo y del peronismo por, según él, promover «operaciones» y «chismes de peluquería» para intentar desestabilizar a su espacio político.
La controversia surgió luego de que se señalara un supuesto vínculo entre Espert y Federico “Fred” Machado, un empresario actualmente detenido por narcotráfico. De acuerdo a la Justicia de Estados Unidos, Machado habría aportado 200 mil dólares a la campaña electoral de Espert en 2019. Sin embargo, Milei negó enfáticamente haber solicitado explicaciones a Espert sobre este tema y descartó cualquier posibilidad de apartarlo como candidato de La Libertad Avanza (LLA) en la provincia de Buenos Aires.
“No voy a dejar que psicópatas me marquen la agenda y digan quién me tiene que acompañar”, remarcó el mandatario, quien aseguró que la acusación forma parte de una maniobra para perjudicarlo políticamente. En la extensa entrevista con radio Mitre, Milei reiteró su confianza en el economista y manifestó que solo desplazaría a un funcionario si tuviera pruebas sólidas en su contra. “Si yo creyera que alguno está sucio, ya lo habría echado”, afirmó, agregando que quienes impulsan estas denuncias «son expertos en ensuciar a la gente» y citó el caso de Enrique Olivera como antecedente.
El jefe de Estado vinculó directamente al kirchnerismo con esta supuesta «operación» y señaló que figuras como Juan Grabois —tercer candidato a diputado por el peronismo en la provincia— buscan sacar rédito político a partir de lo que calificó como rumores infundados. Milei insistió en que los principales referentes del kirchnerismo son quienes deberían rendir cuentas ante la Justicia por graves casos de corrupción. “Su Jefa está presa con una tobillera y le quedan tres causas muy pesadas, como Cuadernos. No están en condiciones de acusar a nadie”, disparó, en clara alusión a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En relación a la situación interna de su gobierno, Milei se mostró convencido de la limpieza de su gabinete y desestimó cualquier tipo de fisura o crisis. Tampoco consideró necesario pedirle a Espert aclaraciones adicionales sobre su pasado político o sus relaciones. “No necesito ninguna aclaración de Espert ni pensé en correrlo de la candidatura”, subrayó, atribuyendo el escándalo a una “repetición” de acusaciones ya lanzadas en 2019.
Por otro lado, el presidente aprovechó la entrevista para referirse al estado de la gobernabilidad y el vínculo con gobernadores y otros actores del sistema político. evocó el reciente encuentro con Mauricio Macri como parte de los esfuerzos por recomponer relaciones y fortalecer el diálogo con las provincias. A pesar del clima tenso que, según describió, genera la “pirotecnia electoral”, Milei consideró que su administración está sentando las bases para implementar reformas estructurales a partir del 11 de diciembre, incluyendo cambios en materia tributaria, laboral y una profundización de la apertura económica.
El mandatario también anticipó que la reunión prevista con Donald Trump en la Casa Blanca el 14 de octubre traerá anuncios clave para la relación bilateral. Reveló que el Ministerio de Economía ya está trabajando en los detalles del acuerdo anunciado por el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent. Milei reiteró que la incertidumbre financiera actual, así como la desconfianza del mercado, son consecuencia directa del accionar del kirchnerismo y del contexto electoral. “Es una cuestión de tener que pasar este infierno que es el año electoral”, reconoció.
En suma, el presidente cerró filas en torno a Espert, rechazó cualquier acusación de corrupción en su entorno y redobló las críticas contra el kirchnerismo, al que responsabilizó por las maniobras políticas y la crisis financiera que atraviesa el país.
