La unión de dos dinastías del polo, los Cambiaso y los Castagnola, continúa dando que hablar en el circuito argentino. El equipo de La Natividad-La Dolfina, que reúne a la leyenda Adolfo Cambiaso y a tres jóvenes talentos de la nueva generación, conquistó este jueves el Abierto de Tortugas tras una ajustada victoria por 12 a 11 sobre Ellerstina-Indios Chapaleufú. Con este triunfo, el conjunto de Cañuelas está a un título de alcanzar la ansiada Triple Corona 2025 y hacer historia en el deporte.
Desde su creación a fines del año pasado, la formación de 40 goles de handicap se posicionó como el máximo favorito de la temporada. No es para menos: a la experiencia y liderazgo de Cambiaso, se suman los hermanos Camilo y Bartolomé ‘Barto’ Castagnola, junto a Poroto Cambiaso, quienes se consolidan como las figuras emergentes del polo mundial.
El duelo decisivo en Tortugas no fue sencillo. El único equipo que había logrado poner en aprietos a La Natividad-La Dolfina durante la temporada fue, precisamente, Ellerstina-Chapaleufú, que ya los había hecho transpirar en la final anterior del Abierto de Hurlingham. En esta ocasión, el partido estuvo cargado de emociones hasta el último segundo.
La Natividad-La Dolfina parecía tener todo bajo control cuando, a falta de un minuto, se imponía 12-9. Sin embargo, dos goles consecutivos de Antonio y Cruz Heguy –el último de penal y a apenas 35 segundos para el cierre– redujeron la diferencia a un solo tanto. El final fue tan intenso como trabado, pero los de camiseta verde y azul lograron resistir y quedarse con el título.
En la cuenta de goles, Poroto Cambiaso, Camilo Castagnola y Barto Castagnola aportaron cuatro cada uno. El equipo, no obstante, reconoció que el desafío fue mayor al esperado y que aún hay aspectos por mejorar de cara al máximo objetivo en Palermo. La progresión del marcador (1-0, 4-1, 4-4, 5-6, 7-7, 8-8, 11-9 y 12-11) refleja lo cambiante y parejo del encuentro.
Finalizado el partido, los protagonistas reflexionaron sobre el rendimiento y la victoria. Barto Castagnola admitió que el encuentro fue más complicado de lo que esperaban: “Se sufrió bastante. Habíamos arrancado muy bien, pero después ellos jugaron mejor que nosotros. Igual, estoy feliz de haber terminado ganando y ya pensando en el último torneo”.
Poroto Cambiaso, por su parte, celebró su primer título en Tortugas, el único que le faltaba para completar la Triple Corona argentina: “Es una locura. Lo venía buscando hace mucho. Ganarle otra final a un equipazo como ellos fue durísimo, pero supimos responder en los momentos importantes”.
En tanto, Camilo ‘Jeta’ Castagnola fue autocrítico con su actuación personal, aunque valoró el logro colectivo: “Tendría que haber hecho más goles, no me sentí bien. Pero es tremendo ganar el segundo torneo de la temporada. Somos un equipazo y hay que seguir así”.
El propio Adolfo Cambiaso, referente absoluto del polo mundial, reconoció que el equipo aún no alcanzó su mejor versión: “No hay que quitarle mérito a Ellerstina, pero nosotros podemos jugar mejor. A veces jugamos bien, otras no tanto. Hay cosas que revisar, pero cuando ganás los dos primeros torneos del año y estás invicto, estás bien”. A sus 50 años, Cambiaso sumó su 44º título de Triple Corona y no oculta su ambición: “El sueño sigue, queremos ganar Palermo”.
El próximo objetivo es el Campeonato Argentino Abierto, el certamen más prestigioso del polo, que dará inicio este sábado. La Natividad-La Dolfina debutará el 8 de noviembre frente a La Zeta, en busca de un logro que no se repite desde hace 15 años: conquistar los tres títulos más codiciados del polo argentino. La última vez que alguien logró tamaño desafío fue el propio Cambiaso, liderando otra versión de La Dolfina junto a Stirling, Mac Donough y Nero. Ahora, el mejor polista de todos los tiempos sueña con repetir la hazaña, esta vez junto a su hijo y sus sobrinos.

 
                                    
