El esperado debut del equipo que fusiona a las dos potencias absolutas del polo argentino no defraudó. La Natividad-La Dolfina, la formación que reúne a los Cambiaso y los Castagnola, hizo su presentación oficial en la Triple Corona 2025 con una actuación arrolladora: venció a La Hache por un contundente 29 a 4 en el primer partido del Abierto de Hurlingham, uno de los tres torneos más prestigiosos del mundo en este deporte.

Este nuevo equipo, nacido tras una histórica alianza sellada a fines del año pasado, está integrado por cuatro jugadores con el máximo handicap (10 goles), todos con lazos familiares. Adolfo Cambiaso, leyenda del polo que sigue vigente a los 50 años, juega de capitán junto a su hijo Poroto Cambiaso y los hermanos Bartolomé y Camilo Castagnola, sus sobrinos. El entrenador es nada menos que Lolo Castagnola, también cuñado de Cambiaso y ex compañero de múltiples conquistas.

La expectativa por ver el funcionamiento de este «Dream Team» era enorme, y la respuesta fue categórica. Desde el inicio, La Natividad-La Dolfina impuso su jerarquía y nunca estuvo por debajo en el marcador. El dominio se reflejó no solo en el resultado final, sino también en la progresión de los parciales: 5-0, 8-2, 11-2, 13-2, 17-3, 20-4, 25-4 y 29-4. Con esta victoria, el equipo aseguró su pase a las semifinales del torneo.

Las figuras del partido fueron Camilo Castagnola, máximo anotador con 11 goles (tres de penal), y Poroto Cambiaso, que sumó 9 tantos. Bartolomé Castagnola aportó 7 conquistas y Adolfo Cambiaso completó con dos goles, uno de ellos de penal. Por el lado de La Hache, que presentó una formación de 32 goles de valorización, los anotadores fueron Bautista Bayugar, Carlos Ulloa e Ignacio Laprida, además de un penal convertido por Joaquín Pittaluga.

El resultado quedó a un solo gol de la mayor diferencia registrada en la historia de la Triple Corona: el 30-4 de La Españada sobre Coronel Suárez II en el Argentino Abierto de 1988. La contundencia del debut no solo marca un hito estadístico, sino que también envía un mensaje claro al resto de los competidores: la unión de Cambiaso y Castagnola, dos apellidos históricos del polo, ha dado lugar a un conjunto que aspira a dominar la temporada y lograr lo que nadie consigue desde 2015: conquistar los tres grandes torneos del circuito argentino.

El nacimiento de La Natividad-La Dolfina no estuvo exento de negociaciones y emociones. Tras la final de Palermo 2024, donde La Natividad venció a La Dolfina, se produjo una reunión clave en Cañuelas. Allí, primos y tío se pusieron de acuerdo para cumplir el sueño de jugar juntos, al menos una temporada. Fue necesario limar asperezas, especialmente entre Adolfo Cambiaso y Lolo Castagnola, quienes tras años de gloria como compañeros, se habían distanciado en 2010 cuando Cambiaso modificó su formación para sumar nuevas figuras.

Finalmente, la alianza fue posible, y no solo por la química familiar y deportiva, sino también por el aporte de dos organizaciones con una caballada de primer nivel y una estructura de excelencia. La camiseta, que combina el verde clásico de La Natividad y el azul tradicional de La Dolfina, lleva los escudos de ambos equipos y simboliza la unión de dos tradiciones ganadoras.

El próximo desafío será la semifinal, donde enfrentarán al ganador entre Ellerstina-Indios Chapaleufú y Los Machitos. Por lo visto en el debut, La Natividad-La Dolfina no solo buscará arrasar en el torneo, sino inscribir su nombre como el equipo dominante de una nueva era del polo argentino.