La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), organismo que reemplazó a la AFIP tras su disolución en octubre de 2024, formalizó este lunes la creación del Comité de Integridad y Ética Pública. Así lo estableció la Disposición 216/2025, publicada en el Boletín Oficial y rubricada por el director ejecutivo Juan Alberto Pazo, dando paso a una nueva etapa en materia de control y transparencia dentro del sistema tributario y aduanero nacional.
El flamante comité surge en respuesta a la necesidad de fortalecer la transparencia y mejorar la cultura organizacional en el ámbito de la administración impositiva y aduanera. Su creación implica la derogación de una serie de normativas que, hasta la fecha, regían bajo la órbita de la ex AFIP, incluyendo aquellas disposiciones que habían dado origen al anterior comité de ética en 2020.
El nuevo órgano estará conformado por el Subdirector General Institucional, los Directores Generales Impositivo y de Aduanas —o sus representantes—, y contará con el respaldo técnico de la Dirección de Auditoría Interna, que ejercerá la secretaría técnica. Asimismo, la disposición recién publicada establece y aprueba el reglamento de funcionamiento que determinará la dinámica interna y los procedimientos del comité.
La Secretaría del Comité dispondrá de un plazo de 60 días corridos para analizar el marco normativo vigente en cuestiones de integridad y ética pública. Durante este período, deberá identificar posibles modificaciones y presentar propuestas de mejora al cuerpo del comité, con el objetivo de actualizar y optimizar los mecanismos de control y conducta ética dentro de la ARCA.
Esta acción se inscribe en el proceso de revisión y simplificación normativa impulsado por la nueva agencia, que fue creada formalmente por el Decreto 953/2024 como un ente autárquico dependiente del Ministerio de Economía. Desde su nacimiento, la ARCA asumió competencias tanto en el ámbito impositivo como en el aduanero, en reemplazo de la disuelta Administración Federal de Ingresos Públicos.
El cambio de estructura y la creación de nuevos órganos de control buscan dotar al sistema de recaudación y fiscalización de una mayor eficiencia, transparencia y capacidad de respuesta ante los desafíos actuales. El Comité de Integridad y Ética Pública tendrá un rol central en la consolidación de una cultura organizacional basada en la integridad, la equidad y la rendición de cuentas, esenciales para el funcionamiento y la legitimidad de la administración tributaria y aduanera.
En paralelo a la conformación del comité, la disposición firmada por Pazo deja sin efecto una serie de disposiciones e instrucciones previas que la ex AFIP había emitido en materia de ética e integridad. Esta revisión normativa no solo simplifica el marco regulatorio interno, sino que también busca actualizar los estándares y lineamientos de conducta conforme a las nuevas demandas sociales y gubernamentales.
La puesta en marcha del Comité de Integridad y Ética Pública se enmarca en un contexto de renovación institucional tras el cierre de la AFIP. Con esta medida, ARCA apuesta a consolidar una gestión más transparente y alineada con los principios de integridad pública, en sintonía con las mejores prácticas internacionales en materia de administración tributaria y aduanera.


